Establecer objetivos en la organización es imprescindible si quiere llegar a algún sitio. Con unos objetivos claros, las personas pueden alinearse y tener una dirección real para todas las tareas que realizan.
Cómo establecer objetivos que apoyen a cada departamento y a toda la organización
A la hora de establecer objetivos en su empresa, tiene que tener en cuenta dos perspectivas: la de cada departamento y la de la empresa en general. Éstas deben apoyarse mutuamente, en lugar de funcionar como vacíos incorporados.
Un objetivo sólo es «correcto» si construye su negocio
Cuando se establecen objetivos para toda la organización, la máxima prioridad es asegurarse de que los objetivos realmente mejoran la empresa, por ejemplo, digamos que su empresa ofrece una suscripción a un servicio, y su objetivo general es aumentar sus márgenes de beneficio. Para ello, podría intentar aumentar el coste de la suscripción. Pero los clientes podrían ver esa subida de precios y abandonar el barco, así que, aunque tengas más dinero que antes, su empresa no ha crecido realmente, un mejor objetivo general que apoye el negocio sería aumentar el número de suscriptores.
Los departamentos son únicos, pero sus objetivos siempre apoyan el panorama general
Dentro de su empresa, cada departamento se encarga de un aspecto diferente de lo que usted intenta hacer, los vendedores, por ejemplo, no calculan los números ni envían las facturas a los proveedores del mismo modo que lo hace el personal de contabilidad. Así que cada departamento debe tener sus propios objetivos, pero el objetivo de cada departamento debe ser un subobjetivo del objetivo general de la empresa y hay que encontrar la manera de comunicar el objetivo general a cada departamento de manera que resuene y motive a cada equipo.
Para ilustrar esto, veamos el ejemplo del suscriptor de antes, el objetivo general es aumentar el número de clientes que tienes, pero si está en el equipo de ventas, su objetivo podría ser hablar con más personas cada mes o llegar a un nuevo público objetivo. Si está en el equipo de atención al cliente, su objetivo puede ser mejorar la satisfacción y la retención de los clientes, lo que fomenta la fidelidad y las referencias, los objetivos y las actividades de los distintos equipos son diferentes, pero ambos apoyan el objetivo general y tienen el mismo resultado de atraer a más personas a la empresa.
Cada departamento debe conocer los objetivos de los demás para que sea más fácil trabajar juntos y colaborar con eficacia, el hecho de que cada departamento vea el panorama general también fomenta un sentido de propósito que construye una cultura más cohesionada. Todos los miembros de cada equipo saben dónde aportan valor, y no dan por sentado a nadie más en la empresa porque entienden el papel que cada departamento tiene en el progreso de la empresa, hablar de los flujos de trabajo de la empresa en las reuniones de todos los empleados, celebrar los logros de todos los departamentos o invitar a los empleados a seguir a los demás de vez en cuando son formas estupendas de ayudar a los empleados a ver la empresa de forma más amplia.
Tener en cuenta los datos
La tecnología puede aportar información sobre casi todo, un gran error que cometen muchas empresas a la hora de establecer objetivos generales o subobjetivos de departamento es distraerse con la información disponible. Por ejemplo, se puede tener la capacidad de mirar una métrica específica, pero si no se relaciona con los objetivos, entonces esos datos no son relevantes y no tienen valor, las empresas también pueden acabar centrándose tanto en los números que se comportan de forma menos ética, hacen todo lo posible para asegurarse de alcanzar las cuotas y quedar bien, cuando en realidad no están satisfaciendo las necesidades reales de la empresa.
Cuando establezca los objetivos del departamento y los objetivos generales, cierra el círculo ponga algunos límites para asegurarte de que estás seleccionando métricas que importan, y que la gente no se vuelve paranoica sobre la cuantificación de lo que hacen.
Con los objetivos generales y departamentales vinculados, su empresa puede crecer de verdad
Establecer objetivos es una forma sencilla de unificar a su personal y obtener mejores resultados. Pero hay que asegurarse de seleccionar objetivos que ayuden a la empresa, cada departamento debe saber dónde encaja y tener subobjetivos que ayuden a toda la empresa a avanzar. La forma de comunicar esos objetivos y de seleccionar los datos puede ayudar a crear un entorno positivo para todos, vea cómo se vincula todo, y pregúntese siempre si va a ser mejor por su esfuerzo.
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