Un evento inesperado en la plataforma de streaming
La noche del viernes, el combate de boxeo entre Mike Tyson y Jake Paul capturó la atención de millones de espectadores. Sin embargo, lo que debería haber sido un evento destacado se convirtió en una experiencia frustrante para muchos, ya que la transmisión en vivo de Netflix sufrió numerosos problemas técnicos. Desde congelamientos hasta interrupciones constantes, los espectadores se encontraron lidiando con una serie de inconvenientes que arruinaron la emoción del combate.
El fenómeno del #NetflixCrash
Tras el evento, el hashtag #NetflixCrash se volvió tendencia en las redes sociales, reflejando la frustración de los usuarios. Según Downdetector, se registraron más de un millón de informes de problemas con Netflix en 50 países, siendo Estados Unidos el más afectado con 530,000 reportes. La situación alcanzó su punto máximo alrededor de las 11 p.m. hora del Este, lo que llevó a muchos a cuestionar la capacidad de la plataforma para manejar eventos en vivo de gran envergadura.
Un combate que rompió récords
A pesar de los problemas técnicos, Jake Paul, un conocido youtuber convertido en boxeador profesional, logró vencer a Mike Tyson, un ex campeón de peso pesado, en ocho rondas. Paul se jactó de que el evento había atraído a más de 120 millones de personas en Netflix, lo que, según él, había llevado a la plataforma a ‘caer’. Este combate se convirtió en una prueba significativa para la infraestructura de transmisión en vivo de Netflix, superando incluso a otros eventos anteriores, como el roast en vivo de Tom Brady, que solo alcanzó 1.8 millones de transmisiones simultáneas.
Lecciones aprendidas y el futuro de Netflix
Netflix ha enfrentado desafíos similares en el pasado, como el retraso en la transmisión de la reunión de la cuarta temporada de ‘Love is Blind’. Sin embargo, la compañía ha estado trabajando para mejorar su oferta de programación en vivo, incluyendo eventos deportivos y programas de entretenimiento. Con dos juegos de la NFL programados para el día de Navidad y un evento de WWE Raw en enero, Netflix tiene poco más de un mes para abordar estos problemas y garantizar una experiencia de visualización fluida para sus usuarios.