Un gigante en el espacio
El cohete New Glenn, desarrollado por Blue Origin, la compañía espacial de Jeff Bezos, se erige como un nuevo competidor en la carrera espacial. Con una altura superior a la Estatua de la Libertad, este cohete ha sido diseñado para llevar cargas pesadas al espacio, y su nombre rinde homenaje a John Glenn, el primer astronauta estadounidense en orbitar la Tierra en 1962. A pesar de ser más corto que el Starship de SpaceX, el New Glenn se asemeja en tamaño al Sistema de Lanzamiento Espacial de la NASA, lo que lo posiciona como un jugador clave en la nueva era de la exploración espacial.
Pruebas exitosas en Cape Canaveral
Recientemente, el New Glenn completó con éxito su ensayo final en Cape Canaveral, Florida, donde todos sus motores fueron activados durante 24 segundos. Este ensayo, conocido como «hot fire», marcó un hito importante para Blue Origin, ya que fue la primera vez que la compañía operó el cohete completo como un sistema integrado. Las llamas de los motores se alzaron entre nubes de vapor, creando un espectáculo visual impresionante. Jeff Bezos, en un post en la plataforma X, expresó su entusiasmo por el próximo lanzamiento, mientras que Elon Musk, su competidor, le deseó buena suerte.
Innovaciones y planes futuros
El New Glenn está diseñado para funcionar con metano y oxígeno líquido en su etapa de refuerzo, mientras que su segunda etapa utiliza hidrógeno líquido y oxígeno. Esta combinación de combustibles permite que el cohete genere una potencia comparable a la de dos portaaviones de clase Nimitz. Además, Blue Origin tiene planes ambiciosos que incluyen la construcción de un módulo lunar para la NASA, denominado Blue Moon, y una estación espacial comercial llamada Orbital Reef. Estos proyectos reflejan la transición de la NASA hacia un modelo en el que las empresas privadas operan laboratorios espaciales en órbita baja, convirtiéndose en clientes de la agencia espacial.
El futuro del New Glenn
La Administración Federal de Aviación (FAA) ha otorgado a Blue Origin la licencia de lanzamiento para el New Glenn, lo que representa el último paso administrativo antes de su primer vuelo. Aunque aún no se ha anunciado una fecha específica para el lanzamiento, se ha sugerido que podría ocurrir el 31 de diciembre, con una ventana de respaldo para el Día de Año Nuevo. La compañía espera reutilizar su cohete al menos 25 veces, lo que podría revolucionar la industria espacial al reducir significativamente los costos de lanzamiento. A pesar de los retrasos y desafíos, el New Glenn está preparado para abrir un nuevo capítulo en la exploración espacial.