En los últimos años, ha habido un creciente interés por parte de los extranjeros en adquirir propiedades en pequeñas localidades italianas a precios irrisorios. Este fenómeno ha inspirado a cineastas a crear historias que capturan la esencia de estas aventuras. La dulce villa, una nueva película de Netflix, es un claro ejemplo de cómo la realidad puede convertirse en una comedia romántica cautivadora.
Una trama que enamora
La historia gira en torno a Eric, interpretado por Scott Foley, un padre cuya vida da un giro inesperado cuando su hija Olivia, interpretada por Maia Reficco, decide comprar una villa italiana en ruinas por solo un euro. Este hecho, aunque sorprendente, es solo el comienzo de una serie de eventos que llevarán a Eric a redescubrir su pasión por la cocina y la vida misma. La película, dirigida por Mark Waters, conocido por su trabajo en Mean Girls, combina humor y romance en un escenario idílico.
Un viaje a través de Italia
La dulce villa no solo es una historia de amor, sino también un homenaje a la belleza de Italia. Filmada en lugares emblemáticos como Roma, Lazio y Toscana, la película ofrece a los espectadores un recorrido visual por paisajes impresionantes y una cultura rica. La cinematografía resalta la arquitectura histórica y los paisajes naturales, creando un ambiente que invita a soñar con una vida en el campo italiano.
Elenco y producción
Además de Foley y Reficco, la película cuenta con la actuación de Violante Placido, quien interpreta a la carismática alcaldesa que vende la villa. La química entre los personajes es palpable y añade una capa de profundidad a la narrativa. La producción, a cargo de Elizabeth Hackett y Hilary Galanoy, logra equilibrar momentos de comedia con toques de drama, lo que mantiene al público enganchado hasta el final.
La dulce villa se estrena en Netflix el 13 de febrero, justo a tiempo para el Día de San Valentín, lo que la convierte en una opción perfecta para una noche de cine romántica. Con su mezcla de risas, amor y paisajes de ensueño, esta película promete ser un éxito entre los amantes de las comedias románticas.