Traces: La experiencia de realidad virtual que transforma el duelo
En el marco del festival SXSW, la instalación interactiva Traces: The Grief Processor ha capturado la atención de los asistentes al ofrecer una experiencia única que combina la realidad virtual con la exploración emocional del duelo. Creada por Vali Fugulin y Couzin Films, esta instalación se aleja del espectáculo habitual y se adentra en un espacio más íntimo y reflexivo.
Una experiencia colectiva de duelo
Traces permite que hasta cuatro participantes se sumerjan en un entorno virtual que refleja las emociones y recuerdos de quienes han pasado por la experiencia antes que ellos. A diferencia de otras instalaciones que buscan impresionar con efectos visuales, Traces se centra en la conexión emocional y la introspección. Al inicio de la experiencia, se invita a los usuarios a compartir una fotografía que evoque sentimientos de pérdida, así como una frase que les ayude a sobrellevar esa emoción. Estos elementos se convierten en parte permanente de la instalación, creando un eco de las vivencias de los anteriores participantes.
Reflexiones sobre el duelo y la conexión
Fugulin, quien ha compartido su propia lucha con el duelo durante la pandemia, explica que Traces no está diseñado para reemplazar la terapia, sino para ofrecer un espacio donde las personas puedan procesar su dolor de una manera casi lúdica. La instalación no se centra únicamente en las pérdidas recientes; de hecho, se desaconseja el uso de fotos de seres queridos que hayan fallecido recientemente. Sin embargo, la emotividad de la experiencia es palpable, y muchos asistentes han expresado su gratitud tras participar.
Un viaje personal y compartido
La experiencia es guiada por Fugulin y su amigo, el actor y ritualista Stéphane Crête, quienes han creado un entorno que se siente tanto íntimo como inmersivo. A medida que los participantes comparten sus recuerdos, la instalación se convierte en un espacio donde el duelo se transforma en una experiencia colectiva, donde cada fragmento de pérdida se entrelaza con las historias de otros. La instalación invita a los asistentes a reflexionar no solo sobre la muerte, sino sobre el cambio y el paso del tiempo, recordando que el duelo abarca mucho más que la pérdida de seres queridos.
En definitiva, Traces es una invitación a explorar el duelo de una manera nueva y significativa, ofreciendo un espacio donde la tristeza se convierte en una experiencia compartida y transformadora. Los asistentes no solo se llevan consigo recuerdos, sino también una nueva comprensión de su propia relación con la pérdida y la memoria.